sábado, 7 de mayo de 2011

Victoria Romero de Peñaloza

Doña Vito" es el nombre con el cual se conoce a Victoria Romero, la compañera del Chacho.
Victoria nació en Lapislázuli pueblito de Chila (Tama) el 2 de abril de 1804. Victoria lucho junto a su esposo por los derechos de su pueblo y fue herida en el campo de batalla.
Ella fue testigo del deguello y descuartizamiento de su esposo por los enviados de Sarmiento , tra lo cual fue llevada como esclava a la ciudad de San Juan. Falleció en 1889 a los 85 años de edad.





"La Victoria Romero" por Jorge Cafrune

Letra: León Benarós, Música: Ramón Navarro.

Esposa del caudillo riojano Ángel Vicente Peñaloza, el Chacho, a quien acompañó en sus campañas militares. Según la tradición, era mujer de temperamento varonil e independiente, que no vacilaba ante el peligro. Nació en la Costa Alta de La Rioja, donde su figura se había hecho legendaria. Los habitantes de la provincia sentían por ella el mismo cariño que por el Chacho, pues ambos compartían las penurias de los desheredados. En la batalla del Manantial, librada por el Chacho contra fuerzas federales en 1842, Victoria realizó una hazaña que cimento su fama. En medio de la lucha, viendo a su marido acorralado, se lanzó en su ayuda. "Debió su vida -escribió José Hernandez en su bigrafia de Chacho- al arrojo e intrepidez de su mujer, quien, viendo el peligro en que se hallaba, reúne unos cuantos soldados y poniéndose a su frente se precipita sobre los que atacaban a peñaloza, con una decisión que habría honrado a cualquier guerrero". El gesto le valió recibir un feroz sablazo sobre su cabeza, causándole una erida desde la frente hasta la boca. El capitán Ibáñez la salvó matando al heridor. La tremenda cicatriz desfiguró el rostro de Victoria, que la disimulaba cubriendose el rostro con un manto. La copla popular aludía así al hecho:

"Doña Victoria Romero,

si usted quiere que le cuente,

se vino de Tucumán

con una herida en la frente".

No por ello dejó de acompañar a su marido en la paz y en la guerra. "La esposa del Chacho venía con frecuencia al campamento y al combate -dice Eduardo Gutiérrez- , a partir con su marido y sus tropas los peligros y las vicisitudes. Entonces el entusiasmo de aquella buena gente llegaba a su último limite y sólo pensaban en protestar a la Chacha, como la llamaba, su lealtad hasta la muerte". En 1863 el Chacho se encontraba en Olta, La Rioja, buscando por fuerzas nacionales que tenían la misión de castigar al caudillo sublevado, y pese a que se había rendido, fue ultimado de un sablazo en presencia de Victoria. Ésta, junto con su hijo adoptivo, fue tomada prisionera y posteriormente liberada. Se ignora la fecha y lugar de su muerte.

"Diccionario Biográfico de Mujeres Argentina", de Lily Sosa de Newton. Plus Ultra.